La consideración de Centro “especialmente cualificado” es uno de los aspectos valorados por el Rector de la UNED en la entrevista concedida a El Cruzado Aragonés. Al mismo tiempo, destaca que ha impulsado una renovación importante de apoyo a la docencia y considera fundamental el apoyo institucional y los beneficios derivados por la presencia de la UNED en ciudades como Barbastro.
¿Qué opinión le sugieren 25 Años del Centro Asociado de la UNED?
- Es una muestra de consolidación de un modelo realmente peculiar donde el valor fundamental es la amplia gama de apoyos posibles a los estudiantes, de manera que no sea una fría enseñanza a distancia, a través de teléfono, ordenador y radio, sino con posibilidad de encontrar caras amigas, apoyo en el Centro y tutorías presenciales. El de Barbastro es un Centro especialmente cualificado porque está entre los que marcan un nivel de calidad más elevado dentro del conjunto de centros que tiene la UNED. Es fundamental el apoyo de las instituciones, no solo del Ayuntamiento, también de la Diputación Provincial, Gobierno de Aragón e Ibercaja. Han entendido que merece la pena apoyar este servicio y que con coste relativamente bajo se permite mejorar la calidad. Por tanto, es todo un símbolo de buen funcionamiento.
En ciudades pequeñas como Barbastro, ¿qué grado de importancia tiene un Centro de estas características?
- Mucha porque garantiza la igualdad de acceso a la Enseñanza superior y es, por tanto, un instrumento adecuado. En ciudades pequeñas y medianas, la presencia tiene más valor porque sería difícil que llegara la Universidad si no es a través de UNED. En segundo lugar porque no es solo enseñanza universitaria, también presencia cultural con actividades que llegan a todos los ciudadanos y enriquece con una oferta diversificada con exposiciones, conferencias y cursos de verano. Sin duda, resaltan más que en las grandes ciudades donde se diluyen porque la oferta es menos necesaria.
En su opinión, ¿cuál es la clave de esta consolidación desde el 18 de octubre de 1983 cuando se inauguró el primer curso?
- La conjunción de factores. Uno, población importante, deseosa de tener oferta cultural y educativa. Dos, administraciones públicas dispuestas a apoyarlo. Tres, equipo de gente como el que ha tenido Barbastro durante 25 años, desde la Dirección hasta el último incorporado.
¿Qué papel juega o ha jugado el Centro Asociado en la aplicación de tecnologías de vanguardia?
- Creo que ha sido el primer protagonista de una línea que potenciamos. Desde el Centro se ha impulsado una renovación en instrumentos de apoyo a docencia, tutorías y exámenes, con el proceso de la Valija Virtual que ha sido uno de los adelantos de mayor modernidad en la gestión de la Universidad. Ahora se intenta implantar en otras instituciones. En este sentido, estamos encantados y se ha firmado un contrato con idea de que esté vigente muchos años para consolidar servicios desde el protagonismo de los Centros Asociados porque ellos conocen mejor que nadie la realidad de la UNED. El de Barbastro ha ido por delante en nuevas tecnologías y hay que reconocérselo.
A nivel nacional, ¿para quién es la UNED en estos momentos?
- Tenemos tal cantidad de demanda de títulos que su enumeración sería muy larga. Desde criterios fundamentales e históricos estaba dirigida para personas que no tuvieron acceso, a quienes se les daba la posibilidad de entrar en la Universidad. Con el tiempo, se ha incrementado y ha beneficiado al colectivo femenino que ha estado muy marginado en el acceso a la Educación Superior durante tiempo. Hoy es un instrumento fundamental en formación continua y cada vez es más importante la labor de formación y puesta al día en conocimientos. Tenemos demanda creciente y atención importante a personas que ya tienen titulación, están en el mercado de trabajo y quieren ampliar formación. Los inmigrantes se han incorporado mucho en los últimos cursos y por tanto, contribuimos a su integración social.
¿Cree, entonces, que es una Universidad sin barreras?
- En efecto. Además, resalta el aspecto de beneficiar a personas con discapacidad y podríamos hablar también del programa de asistencia a centros penitenciarios. Casi la mitad de los estudiantes discapacitados, del sistema universitario español, están en la UNED, siempre accesible.
De cara al próximo Espacio Europeo, ¿qué cambiará?
- Primero, que todas las universidades se aproximarán al modelo UNED porque se pondrá el acento en el esfuerzo de aprendizaje, en la labor de tutorización y seguimiento del estudiante y en aspectos que se aproximan más a modelos aplicados en la UNED que en las demás. De todas formas, el esfuerzo de adaptación también nos afecta porque tendremos que mover las piezas del complejo entramado donde la docencia no es relación directa entre el enseñante y alumno, sino que hay todo un proceso que incluye sede central, centros asociados, profesores de departamentos y tutores, donde la coordinación es esencial de cara a 2009, cuando la UNED oferte los títulos de Espacio Europeo de grado en consonancia con el prestigio bien ganado.
¿La UNED da respuesta a las demandas actuales de formación?
- La prueba es que tenemos 180.000 estudiantes, entre enseñanzas regladas y no regladas. Significa que damos respuesta pero y estamos atentos, siempre, a las mejoras necesarias para la actual demanda social. Gestionamos con asociaciones empresariales y colectivos de diverso tipo para conocer el tipo de necesidades reales para colaborar en la demanda formativa.