En su libro El poder de la imagen Doménech Font dedico un apartado a lo que denomina "Retórica de la imagen e ideología".
Nos advierte que, detrás de lo aparente, hay una serie de elementos - de significantes- que son los que, en última instancia, definen la naturaleza del mensaje. La retórica de lo visual es algo esencial para analizar su ideología. La retórica comprende un conjunto de operaciones - siempre artificiosas- que caracterizan el mensaje y buscan el asentimiento persuasivo.
De todo lo anterior es perfectamente consciente Jan van Eden. Y se sirve de ese conocimiento que, añadido a unas dotes magistrales de dibujante y pintor, fundamentalmente expresionista, contrapone en esta Exposición, de alguna manera antológica, cuadros que a pesar de llevar casi cuarenta años pintados, se manifiestan de una brutal actualidad: "McNamara in Montreal", "General", "El demagogo" "Cárcel"... que contrastados con los de última ejecución "Al Nakba", "Demolición", "Víctimas"... enfatizan el discurso visual que el artista se esfuerza en transmitirnos. Porque Jan van Eden nunca ha sido neutral, ni como persona ni como artista y en su batalla: "La batalla de pintor" hermoso y sugerente título de esta muestra se ha situado siempre del lado de los débiles.

Magnífica exposición que nos ofrece algo más que el disfrute distanciado de las obras. Son tiempos confusos y complejos; Jan van Eden, como artista plástico, nos aporta su visión y solicita de los espectadores la adscripción y el compromiso formal con sus creencias La consciencia de lo que fue, de lo que es y la reflexión personal sobre lo que pensamos que debería ser.

María Jesús Buil
Directora de las salas de exposiciones